Blog de Ignacio Fernández

Blog de Ignacio Fernández

lunes, 24 de marzo de 2014

Sobre los impuestos


     Lo raro a estas alturas de la desigualdad es que en este país haya todavía impuestos directos. A no ser, claro, porque con ellos se continúa aniquilando las rentas del trabajo frente al buen trato que se concede a las del capital. ¿Por qué, si no, la renta media del empresario medio es en España menor que la renta media del trabajador medio?

     Pongamos un ejemplo sencillo. El de un trabajador o trabajadora que gana un sueldo de 1.000 euros al mes y que, como puede comprenderse, no tiene ninguna capacidad de ahorro. Es decir, mil gana, mil gasta, no hay alternativa según está el patio. Pues bien, supongamos que sobre su nómina se aplica un descuento en razón del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas de un 15%. Y supongamos que al gasto que lleva a cabo sin ningún exceso se le aplica, en término medio, un Impuesto sobre el Valor Añadido de otro 15%. El resultado, siendo generosos con las cifras, es que la carga impositiva de esa persona equivale al 30% de sus ingresos mensuales. Nada que ver, evidentemente, con lo que puede recaer sobre quienes, con sueldos más altos y hasta el delirio en ciertos casos, tiene unas posibilidades de ahorro crecientes conforme a sus emolumentos superiores. Y nada que ver, por supuesto, con el Impuesto de Sociedades del que algunos se sirven o con otros vericuetos no necesariamente fraudulentos, que ése es otro cantar.

     Tal es el panorama sobre el que, dicen, pretende actuar la próxima reforma fiscal del Gobierno, sobre la cual sólo conocemos algunas sugerencias de expertos. Se sigan o no, lo que sí está declarado es que no hay otro objetivo que el equilibrio, para lo cual se bajarán unos impuestos y se proclamarán sus beneficios mientras que se subirán otros y se pretenderá que pasen desapercibidos. Pero el resultado será similar al descrito más arriba, si no peor. Y las desigualdades seguirán creciendo.

     A nadie le extrañe, pues, que la OCDE diga que, durante la crisis, al 10% más rico las cosas le han ido mejor que al 10% más pobre.

Publicado en La Nueva Crónica, 25 marzo 2014

No hay comentarios:

Publicar un comentario