Blog de Ignacio Fernández

Blog de Ignacio Fernández

domingo, 13 de abril de 2014

Urquijo / Vega / Pereza


     En el catálogo de las nostalgias de la música española figuran dos nombres insignes: Enrique Urquijo y Antonio Vega. Uno y otro fueron muy amigos de jugar a las versiones, el primero junto al grupo Los Problemas y el segundo con todo lo que le pusieron a tiro. Desaparecidos ambos, Pereza se unió al triángulo con una canción compartida por todos: Agárrate fuerte a mí, María.

     Lo mismo que Julia Goytisolo recibió el regaló envenenado de su padre Agustín en forma de poema y más tarde canción, Palabras para Julia (en esta misma ventana la hemos visitado), María Urquijo, la hija de Enrique, cargará siempre sobre sus espaldas con este cantable desesperado. No debe ser fácil, no lo fue para la primera, a pesar de que se trataba de un texto de invitación a la vida y a la esperanza; la segunda, en cambio, no podrá evitar, sin culpa alguna por supuesto, el drama de no haber agarrado lo suficientemente fuerte al padre y al cantante que se le iba, que nos iba. De hecho, llevaba yéndose ya desde el principio. Hubo como una especie de maldición venida no se sabe de dónde que infectó la vida de Los Secretos: primero fue Canito, su batería, y luego Pedro Díaz, su sustituto. Lo de Enrique, muerto en situación lamentable en 1999, fue el remate. “Llevadme a la clínica, que me doy miedo”, le dijo a su hermano, en un anuncio mucho más prosaico que la letra de …María, pero al fin y al cabo dos declaraciones con el mismo sentido trágico.

     En 2000 apareció el disco «A tu lado», con 17 canciones de Los Secretos en otras tantos arreglos y voces, entre ellas la de Antonio Vega. Cuentan que la grabó de un tirón, tal y como solía consumir la vida, lo que no impidió que el resultado fuese un auténtico ejercicio de maestría y de sensibilidad. Como Enrique, también Antonio parecía un músico maldito en progresivo deterioro. Precisamente, las versiones le ayudaron a completar su carrera en solitario de tal modo que fueron recogidas en un disco exclusivo en 2004, «Escapadas». En él, junto a …María, otra versión magnífica y recomendable, la que hizo de Romance de Curro el Palmo, de Joan Manuel Serrat. Y, curiosamente, el propio Antonio fue materia para otro disco de versiones, «Ese chico triste y solitario», en este caso con recreaciones de su repertorio.

     Por fin el tercer lado del triángulo, más cateto que hipotenusa, la verdad, lo ocupan Rubén y Leiva, es decir, Pereza. Su versión de …María no aporta nada nuevo, más bien es fea, pero se inserta en la serie de los que pretenden malditismos y por eso la traemos aquí. También para destacar que hay meteduras de pata supremas, y ésta es una de ellas. Ni el dúo necesitaba meterse en estos líos ni estamos ante una aportación a la historia, salvo si de gatillazos hablamos. Pero es bueno saber que aquellos chicos, los Urquijo, que fueron tratados de babosos en sus primeros años, conquistaron con el tiempo otro público y otras devociones. También sus letras se habían hecho agrias, como agrio es al final nuestro recuerdo.


Publicado en genetikarockradio.com, 16 abril 2014

No hay comentarios:

Publicar un comentario